Las leyes federales y estatales requieren que un empleador proporcione un empleado cualificado o solicitante con discapacidad a recibir una modificación o ajuste a su entorno de trabajo para permitir al individuo a participar en el proceso de solicitud o para realizar las funciones esenciales del trabajo.
Esto se conoce como una acomodación razonable.
Las acomodaciones razonables pueden incluir ajustes al empleo para asegurar que un individuo calificado con una discapacidad tiene derechos y privilegios de empleo iguales a los de los empleados sin discapacidades.
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